En la Sesión de este jueves se avaló un Proyecto de Ordenanza para que se incorpore dentro del artículo 11° del Anexo I de la Ordenanza N° 9.662 a “la quema y/o combustión de cubiertas, cámaras o neumáticos de cualquier tipo, estado y dimensión a cielo abierto” como una práctica considerada perjudicial para el medio ambiente. La propuesta fue trabajada por la concejala Noelia Chiementín (FPCyS-CCARI).
Asimismo, también se agregará que “en el caso de la quema de cubierta y/o combustión de cubiertas, cámaras o neumáticos de cualquier tipo, estado y dimensión a cielo abierto, se pueda efectuar la denuncia ante los jueces competentes, tomar las previsiones correspondientes y convocar a quien corresponda”.
En el Recinto, Chiementín planteó que se pueda proteger el medio ambiente, la integridad física de los ciudadanos y evitar posibles daños materiales. La Concejala señaló que “nuestra preocupación por este tema nace a partir de un artículo que llega a nuestras manos sobre un estudio realizado en la Universidad de Tucumán por profesores de esta casa de estudios y que quisieron tener pruebas fehacientes de lo que significa la contaminación en este aspecto. Ellos participaron de distintas expresiones públicas donde se procedía a la quema de cubiertas en la ciudad de Tucumán y realizaron estudios que determinaron que la quema de cubiertas representa, en una hora, cien veces más de lo que significa la quema de cualquier otro producto”.
Tomar conciencia
Noelia Chiementín sostuvo que “en nuestra ciudad tenemos que ser conscientes que en un día donde no hay viento igual existe una contaminación que se multiplica varias veces y si corre viento esto alcanza a productos que se exhiben al natural en cualquier lugar como frutas, verduras o cualquier elemento que sea para el consumo doméstico. Las consecuencias en las personas son crisis alérgicas o respiratorias, producen además enfermedades crónicas y son altamente graves como contaminantes en el aparato respiratorio”.
Por otro lado, contó antecedentes de otras ciudades que han prohibido la quema de estos productos. “La mayoría de las ciudades son turísticas como El Calafate, Guaymallén o Posadas, todas ciudades comprometidas con el cuidado de la salud y el medio ambiente”.
En lo que hace a la utilización de estos elementos en protestas en la vía pública, afirmó que “lo que no podemos hacer es poner en juego la vida de las personas por un reclamo sectorial o personal”. Y finalizó: “Pensando siempre en la salud del conjunto, esta iniciativa debe discutirse para que tomemos conciencia que cada uno de los santafesinos debemos luchar por un ambiente puro, agradable y sano. Por eso también tantas son las iniciativas que estamos realizando desde este Recinto en beneficio de un medio ambiente más natural y mucho más sano”, reflexionó Chiementín.