En la reunión, mantenida el jueves 16 de julio en la Sala Zapata Gollán, los concejales expresaron que en lo inmediato analizarán pedir formalmente una reunión con el intendente de la ciudad, para poder dialogar sobre el tema. Además, urge encontrar una solución dado que desde el Ejecutivo les dieron un plazo a los comerciantes para que abandonen su actual asentamiento y se trasladen a la parte trasera del CIC de Facundo Zuviría.
“Nos propusieron ir un domingo a probar en el CIC, pero la mayoría de la gente dijo que no, asique lo damos por perdido a eso”, expresó Florencia Baigorria, y agregó que algunos de los feriantes que voluntariamente aceptaron ir a ese lugar, volvieron a la ciclovía porque en la nueva localización, las ventas no dejan ganancia.
También manifestaron que es intención de los comerciantes formar una cooperativa de trabajo “para tener una personería jurídica, estar reconocidos y encuadrados en la Municipalidad y encarar el tema de otra forma”, explicó Baigorria.
Una historia que se multiplica
Florencia Baigorria fue una de las voces más escuchadas durante la reunión. Fuerte, clara y concreta cada vez que tuvo que contar ante los presentes cuáles son los pedidos, las opiniones y las necesidades que atraviesan los feriantes mal llamados “del trueque”.
Es que ya no trocan elementos -una actividad que surgió con fuerza cuando la crisis de 2001 se hizo carne entre los argentinos-, sino que venden ropa usada y nueva; alimentos y diversas mercaderías. “Es como un super gigante”, describe.
Florencia tiene apenas 20 años, estudia Abogacía y Martillero Público en la Universidad Nacional del Litoral. Hace cuatro meses que empezó a ofrecer ropa usada para vender en la feria y cuenta que “trabajo ahí porque no consigo otro trabajo”.
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No es la única en la ciclovía de Don Bosco que busca ganarse el sustento vendiendo objetos. “Hay ingenieros civiles y arquitectos trabajando porque lamentablemente no tienen un trabajo fijo; estudiantes de medicina, de la UTN, de diseño gráfico”, enumera. “No es que somos ignorantes los que vamos ahí. También hay gente grande, de la tercera edad que no tiene un ingreso, ni jubilación, ni pensión, ni planes sociales, y viven de esto”.
La situación se repite en 227 casos. Esa es la cantidad de familias que participan de la feria los miércoles, viernes y domingo, entre las 8 de la mañana y las 17.30 horas, haga frío, calor, esté nublado o haya salido el sol.
“Detrás de cada uno hay una historia, la mayoría son tristes, y el trueque les dio la dignidad que no tenían”, explica Florencia. Y cuenta que “hay chicos que eran drogadictos y hoy trabajan ahí, cirujas, chicas que ejercían la prostitución y gracias a dios hoy no tienen que salir a la calle porque encontraron en el trueque su lugar”. Describe que todos actúan como “una gran familia, muy unida”, donde hay madres, abuelos y jóvenes ganándose el sustento.
“Estamos bien organizados, limpiamos entre las 17.30 y las 18.30 horas, porque no tenemos apoyo de nadie”, dice Florencia. El próximo viernes los feriantes deberán abandonar su actual emplazamiento por indicación municipal. “Seguiremos estando ahí hasta las últimas consecuencias, la gente está decidida a quedarse porque ahí está la venta y la plata que se llevan todos los días para comer”.
La última frase de Florencia no deja lugar a dudas: “defiendo esto porque es mi trabajo”.
Antecedentes legislativos
La Resolución Nº 13.011/09, sancionada el 25 de junio pasado y que fuera ingresada por la concejala Obeid, solicita al Departamento Ejecutivo Municipal que cumpla con la Resolución Nº 12.640, aprobada el 4 de septiembre de 2008. La misma dispone la creación de una Comisión Asesora para la elaboración y seguimiento de la reubicación del Nodo de Trueque que funcionaba en la Plaza Fournier y recientemente lo hacía en la ciclovía de Facundo Zuviría y Estanislao Zeballos.
La otra iniciativa fue ingresada por el concejal Héctor Acuña (SFC) y solicita al Municipio que ofrezca a los comerciantes del Nodo del Trueque, lugares alternativos a los ya existentes para su relocalización.
La Resolución Nº 12.787, sancionada el 20 de noviembre de 2008, disponía en su artículo segundo convocar “a una mesa de diálogo, dentro del plazo de quince (15) días de aprobada la presente, con representantes de vecinos, comerciantes, puesteros de la plaza Fournier y parque Juan de Garay, Centro Comercial de Santa Fe, feriantes fruti-hortícola, el Departamento Ejecutivo Municipal, un (1) Concejal por bloque y demás instituciones de bien público, y/o asociaciones civiles sin fines de lucro interesadas, a fin de debatir y decidir en forma consensuada y participativa el futuro traslado de una feria”.
El 7 de agosto de 2008 se sancionó la Resolución 12.575, de autoría de la concejala Chiementín, donde se propone recuperar el espacio público ocupado por el Nodo del Trueque en la plaza Fournier, buscando otorgar otro espacio adecuado para la actividad. Allí se considera como alternativa, y si el Gobierno provincial lo acepta, el gimnasio o predio del ex –campo universitario.