La Concejala Marta Fassino presentó un proyecto de Decreto, en el que propone designar con su nombre al Recinto de Sesiones del Concejo Municipal de la Ciudad de Santa Fe. En el mismo, la edil da cuenta de la trayectoria y las acciones del Dr. Agustín Zapata Gollán a lo largo de sus años de vida.
Cabe recordar que Agustín Zapata Gollán, se destacó en las diversas actividades que desarrolló, sea como historiador, periodista, xilógrafo, escritor, profesor y arqueólogo. Cursó sus estudios secundarios en el antiguo Colegio de la Inmaculada de los Padres Jesuitas. Luego de doctorarse en Derecho y Ciencias, y tras una corta carrera en la administración judicial, ejerció el periodismo.
Su trayectoria abarca innumerables hechos: en 1985 se lo declara Ciudadano Ilustre de la Provincia, en mérito a sus servicios al bien público, por su obra y aportes a los estudios relativos a las culturas aborígenes de nuestro territorio e historia del período hispánico; perteneció a numerosas instituciones culturales y científicas.
Por su iniciativa, en torno al Departamento de Estudios Etnográficos y Coloniales, se formaron tres instituciones que le acompañaron con su trabajo y que, luego de su muerte, han mantenido el compromiso con el legado de Agustín Zapata Gollán: la Asociación Amigos de Santa Fe la Vieja (fundada en 1953 y reinstituida en 1975), la Asociación Conmemorativa de la Primera Yerra (1973) y el Centro de Estudios Hispanoamericanos (1981).
Comprometido con la actividad política, ejerció la intendencia municipal de Santa Fe. Asumió el 21 de febrero de 1932, cuando tenía 36 años, habiendo sido designado para esa función por el Gobernador demócrata-progresista Luciano Molinas.
Asimismo, el texto del proyecto presentado por la Concejala expresa “como político, se destacó por su lucidez, por el valor intelectual de sus argumentos. A esto le sumó un sentido ético estricto. Era un hombre culto, cordial, con mucha claridad. No declaraba la moral, la ejercía”.
El Dr. Zapata Gollán fallece el 11 de octubre de 1986 a los 91 años en nuestra ciudad, dejando el ejemplo de un estilo de vida, de una forma y una conducta de gobierno. “Por ello el mejor homenaje que le podemos hacer es no olvidar su mensaje” finaliza el fundamento del texto.